Una vez que tenemos la levadura madre, colócala en un recipiente con una taza de harina de gran fuerza y media taza de agua sin clouro.
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Cúbrela y guarda en la mesa de la cocina durante toda la noche
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Por la mañana, más o menos a las 5’30-6h, añade 4 tazas (760g) de harina a la levadura madre, 2 soperas de aceite de oliva; una sopera de miel, 3 cucharadas de café de sal, 2 tazas de agua tibia.
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Esparce una buena cantidad de harina sobre la mesa y amasa la masa no más que 12minutos.
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Deja que se fermente durante 4-6 horas o hasta que se doble y un poco más
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Parte la masa en dos partes iguales
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Estira cada trozo con cuidado para formar una bola y colócala en la panificadora (o fuente para hornear en un horno) y deja que se fermente hasta 3 veces su tamaño original.
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10 minutos antes de hornear, corta la superficie con tijeras.
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Después de 10 minutos de cocción, con una brocha, pinta la superficie con aceite de oliva.
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Hornea 20 minutos más.
el 31 de julio de 2011
